Miércoles, 13 de Julio de 2011 16:49
Alberto Alonso Criollo, consejero Presidente del Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Oaxaca (IEEPCO), reconoció que el órgano heredó de su antecesor, José Luis Echeverría Morales, la grave conflictividad pos-electoral de los municipios regidos por el sistema de Usos y Costumbres y de partidos políticos.







Tras mencionar que la designación de la integración del Consejo General fue avalada por la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (STEPJF), ésta dijo, fue una decisión decisiva y apegada a derecho.



Por lo que manifestó que las inconformidades generadas por esta disposición corresponden a la “lucha de actores políticos y de posiciones subjetiva”, lo que representa una irresponsabilidad al hacer señalamientos en contra de este órgano.



Aseguró que el IEEPCO trabaja para garantizar la democracia en la entidad, la cual dejó entrever, no existió durante varios años; toda vez que lo único que se generó fue una “grave conflictividad pos-electoral”, en ambos sistemas de elección de autoridades



Alonso Criollo subrayó que a más de cuatro meses de su gestión al frente de del Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Oaxaca (IEEPCO), se ha dado solución a diversas problemáticas relacionadas con su ámbito.



En este sentido desechó las criticas en sus contra, las cuales lo señalan como incompetente e incapaz para evitar que la entidad se “incendie” a través de hechos violentos como los registrados en Santiago Choapam.



Al realizar un balance del trabajo realizado hasta la fecha, recalcó que el IEEPCO tiene sólo cuatro conflictos poselectorales por resolver, mientras que del lado del Tribunal Estatal Electoral (TEE), tendrá que determinar la situación en San Juan Mixtepec, San Juan Lalana, Guelache y uno más.



En tanto el Congreso del Estado tendrá que consensar en el caso de Sola de Vega Cotzocon, San Andrés Cabecera Nueva entre otros